Las Terapias alternativas

En los últimos años han ido creciendo la utilización de alternativas a la medicina convencional. Es curioso que teniendo en cuenta que la medicina está muy avanzada, cada vez la medicina natural va teniendo más adeptos. Seguramente es porque nos hemos ido dando cuenta que la medicina convencional es más agresiva a la larga para nuestro cuerpo y que la tradicional en algunos casos es igual de eficiente y a la larga los efectos secundarios son menores.

Esta medicina es totalmente compatible con la tradicional, y sí que hay que dejar claro que nunca se debe dejar un tratamiento convencional para sustituirlo por el natural. Las medicinas alternativas en algunos casos sus resultados tardan más en llegar pero a la larga son menos nocivos.

Existen una gran variedad de medicinas alternativas, y casi nunca son enseñadas en las universidades. También son llamadas medicinas complementarias. La realidad es que estas terapias no son nuevas, ni han surgido de repente, son medicinas que llevan utilizándose desde la antigüedad, pero que en occidente fueron sustituyéndose por la convencional. Pero quien no ha echado mano a los consejos de las abuelas y a los remedios caseros.

Las terapias alternativas la podemos dividir en dos tipos, la que alivian el dolor físico y las que son beneficiosas pare el dolor psíquico (depresiones, nervios…)

Una de las bases de las terapias alternativas es creer en las fuerzas de la naturaleza y todo es movido por una energía superior.

Antes de utilizar un tipo de terapia deberíamos informarnos sobre ella y recordar siempre que lo que es bueno para unos no significa que lo vaya a ser para nosotros.

Aunque la medicina alternativa no resuelva muchas veces un problema, si que lo alivia y ayuda a hacer la vida más llevadera al paciente.

Seguro que habéis oído hablar de muchas técnicas y seguro que habéis utilizado alguna de ellas.

Algunas de las más utilizadas son:

Acupuntura:  Empleada por la medicina china, parte del concepto de que todo lo que existe en el universo se compone de dos polos opuestos que se complementan. La enfermedad aparece por una descompensación en los dos polos del cuerpo. La acupuntura consiste en introducir agujas en determinados puntos que, al ser estimulados, modulan el paso de la energía -aumentando o disminuyendo su flujo- para lograr la armonía entre fuerzas positivas y negativas (el yin y yang) y recuperar la salud.

Aromaterapia:  Se basa en la aplicación de óleos y aceites esenciales de plantas aromáticas y especias con efectos curativos físicos, mentales y emocionales. Trabaja con más de ochenta esencias que se usan como tópicos, inhalaciones o baños.

Cromoterapia:  Esta terapia se basa en el empleo de colores para producir ciertas respuestas psicológicas y químicas, y a partir de ahí determinar el diagnóstico del paciente.

Flores de Bach:  Parte de los principios planteados por la homeopatía, cada una de estas escuelas agrupa ciertas especies de plantas silvestres con las que hacen sus preparados. Estos remedios alivian los estados mentales negativos que pueden originar enfermedades.

Hidroterapia:  Consiste en el uso terapéutico del agua y sus objetivos son disolver tensiones, eliminar toxinas y revigorizar. Utiliza fricciones, compresas, baños de inmersión, lavajes localizados. Calman, relajan, activan la circulación, descongestionan y desintoxican.

Homeopatia:  Trata al paciente con pequeñas dosis de sustancias que si se aplicarán en personas sanas y en cantidades mayores  provocarían síntomas parecidos a los que pretende curar. Su creador, Samuel Hahnemann, se basó en el principio por el cual «lo similar cura a lo similar» y en que «el efecto de un remedio es inversamente proporcional a su cantidad». Así, sustancias provenientes de los reinos vegetal, mineral y animal son diluidas en dosis infinitesimales y convertidas en medicamentos eficaces, sin efectos secundarios. El diagnóstico no pierde de vista que el cuerpo es parte de un todo (que existe una interdependencia entre los físico, el temperamento, los afectos, el estilo de vida y la profesión del paciente) y procura reestablecer el equilibrio general.

Musicoterapia:  Usa la música como vía de expresión de sentimientos y emociones. Suele emplearse en alteraciones mentales y emocionales y en niños discapacitados.

Naturopatia:  Prescribe productos naturales y enfoca los disturbios físicos y psicológicos que perturban al individuo. Propone cambios en la alimentación, utilización de plantas, ejercicios de relajación, masajes o baños termales. Considera que el ayuno es excelente para desintoxicar el organismo. Descarta la ingesta de productos refinados, grasas y bebidas estimulantes. es la más cercana a la medicina tradicional, pues muchos componentes de fármacos no son más que síntesis de principios activos presentes en algunas plantas.

Osteopatia:  Por medio de manipulaciones más o menos pronunciadas de articulaciones, músculos y vísceras, puede restaurar la circulación arterial, venosa y linfática, así como la transmisión de los reflejos nerviosos, y hacer desaparecer los desórdenes producidos por su alteración.

Quiropraxia:  Tratamiento manual para los desórdenes del aparato musculo esquelético. Mejora la flexibilidad de las articulaciones vertebrales y de los músculos, aun cuando no pueda curar el proceso degenerativo que origina el problema.

Reflexologia:  Masajes de pies y manos por medio de los cuales se tratan enfermedades. Parte de la base de que en ellos están reflejados todos los órganos y funciones vitales, por eso a través de la estimulación de los puntos que allí se encuentran (sobre todo en la planta de los pies) es posible mejorar el bienestar físico.

Reiki:  Método japonés que equilibra la energía corporal, tanto en el plano físico como en el mental, emocional y espiritual. Se basa en activaciones a través de las manos que, casi sin tocar al paciente, amplifican el ki o energía vital (Rei indica la energía que fluye en todo lo que está vivo). Alivia dolores de reumatismo y artritis, y logra un estado de relajación profunda.

Sofrologia:  Conjunto de ejercicios físicos y psíquicos que estimulan el ritmo cardíaco, el de un órgano o la totalidad de las funciones vitales. Con ella se puede alcanzar cierto estado de anestesia. Es una técnica a mitad de camino entre la hipnosis y la relajación.

Yoga:  Sistema integral indio para lograr una profunda relajación, tranquilidad y concentración unidos a una mayor flexibilidad y vigor físicos. Propone unas seiscientas posturas o asanas que, entre otras funciones, activan músculos que raramente se mueven y provocan masajes naturales, erogan zonas que habitualmente están contraídas y relajan músculos y tendones tensionados.

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